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martes, 31 de marzo de 2015

BOEDO, CALLE LINDA


Tango

Música: Antonio Tanturi
Letra: Arturo Rodríguez Bustamante

Sos Boedo la Florida de Almagro a Patricios.
Calle noble y ancha, todo corazón,
donde el pueblo suña, trabaja y shotea
cancha de la vida, field de la ilusión.
Si es en los domingos se viste l’acera
con lindas pebetas que a misa se van,
mientras los burreros pasan redoblonas
¡de muchos caballos que nunca se dan!

Boedo, calle linda sin igual,
Boedo, sos la flor del arrabal.
Yo te canto con el alma
porque sos como una madre
y hasta quedás más compadre
con una Universidad.
Boedo, calle linda y sin igual.
Boedo, sos la flor del arrabal.

Hay de todo en ella, como en la botica.
Gente de trabajo, mundo intelectual,
quinieleros buenos que se fían un mango,
novias que se piantan fugaza y fainá.
Cines concurridos, típicas orquestas,
cándidos y guapos de la vecindad,
hinchas fubolistas, fabriqueras postas
¡la radio con alto parlante y demás!...

BOEDO Y SAN JUAN


Tango

Música: Enrique Cadícamo
Letra: Enrique Cadícamo

De aquí, de Boedo y San Juan,
voy a cantar
un tango triste y sentido...
Porque quiero saludar y recordar,
el barrio donde he nacido...
Dónde quedó la emoción
de mi niñez,
con cielo azul de rayuelas...
¡Barriletes de color,
ilusiones de papel,
que ya el viento se llevó!...
Todo aquello, ¿dónde está,
esquinitas de mi ayer,
de aquí, de Boedo y San Juan?

Hoy, que empiezo a encanecer
y a comprender
lo que es la vida...
¡Qué daría por volver
y por tener
la edad perdida!
Hoy, que empieza el otoñal
anochecer
de mi existencia...
¡Cómo añoro lo que fue
el paisaje tan fugaz
de aquel claro amanecer!...

De aquí, de Boedo y San Juan
salí una vez
y me perdí en la distancia...
¡Quién no sueña en el café
alguna vez,
hacerse un viaje hasta Francia!...
¡Allí mi barrio quedó
lejos de mí,
pero muy cerca de mi alma!
Y en las noches de París
su recuerdo se agrandó
y en diez años no volví...
Y al volver, yo lo encontré
tan cambiado, que lloré
igual que cuando me fui...

Hoy, que empiezo a encanecer
y a comprender
lo que es la vida...
¡Qué daría por volver,
y por tener
la edad perdida!
Hoy, que empieza el otoñal
anochecer
de mi existencia...
¡Cómo añoro lo que fue
el paisaje tan fugaz
de aquel claro amanecer!...
Todo aquello, ¿dónde está,
esquinitas de mi ayer,
de aquí, de Boedo y San Juan?

BOEDO


Tango 1927

Música: Julio De Caro
Letra: Dante A. Linyera

Sos barrio del gotán y la pebeta,
el corazón del arrabal porteño,
cuna del malandrín y del poeta,
rincón cordial,
la capital
del arrabal.

Yo me hice allí de corazón malevo
porque enterré mi juventud inquieta
junto al umbral en el que la pebeta
ya no me espera
pa' chamuyar.

Boedo, vos sos como yo:
malevo como es el gotán,
abierto como un corazón
que ya se cansó de penar.
Lo mismo que vos soy así:
por fuera cordial y cantor,
a todos les bato que sí
y a mi corazón le bato que no.

Sos como yo de milongón... Un cacho
del arrabal, en su emoción del lengue,
ande el gotán, provocador y macho
hoy es el Dios
Nuestro Señor
del Berretín.

¿Qué quiere hacer esa fifí Florida?
¡Si vos ponés tu corazón canyengue,
como una flor en el ojal prendida,
en los balcones
de cada bulín!

BOCHA


Tango 1981

Música: Astor Piazzolla
Letra: Horacio Ferrer

A Pepe Trelles

Vamos, Bocha viejo, tan querido,
te lo había prometido
y aquí estoy, ¿cómo te va?

Sé que de silencio estás vestido,
pero el alma de un amigo
se oye clara por igual.

Qué de cosas nuevas que sabrás,
los misterios que has entrado a ver:
debe ser hermoso, en serio,
sospechar la eternidad,
sin cuerpo y sin edad.

Bocha, vos que tanto me decías
que al morir todo termina,
de otro modo pensarás.

¿Viste?, hay que tener filosofía,
si el dolor de cada día
nos insiste en que no estás.

Mis ojos se preguntan
por qué no te ven más,
y siento que se inundan;
yo no, ¿por qué llorar?

Yo no, porque me digo,
no sé si bien o mal,
que mientras yo esté vivo,
conmigo vivirás.

Y ¡qué le vas a hacer!
Es duro pero es cierto:
yo también un poco he muerto,
vamos, Bocha, no aflojés.

Siempre, en el café pido dos copas,
y al beber la tuya, Bocha,
por mi boca conversás.

Y, otra vez, me hablás de fantasías,
de las pibas, de la guita
que ya no necesitás.

Porque ahora sos un sabio y yo
por tu ser palpito a Dios, y ayer
alguien dijo que estoy loco,
que hablo solo, y lo miré
¡sabés con qué piedad!

Sé que hay que dejarse de macanas,
que vivir de la nostalgia
no es posible, ¿para qué?

Vamos, Bocha viejo, que en la vida
nunca hay última partida
cuando el lazo aprieta bien.

Mis ojos se preguntan
por qué no te ven más,
y siento que se inundan;
yo no, ¿por qué llorar?

Yo no, porque me digo,
no sé si bien o mal,
que mientras yo esté vivo,
conmigo vivirás.

Y ¡qué le vas a hacer!,
es duro, pero es cierto:
yo también un poco he muerto,
vamos, Bocha, no aflojés.

BOCA SUCIA


Tango

Música: Luis Torres Rojas
Letra: Luis Torres Rojas

Boca sucia,
con el tiempo tú cambiaste
ya no son los mismos besos
ni caricias que me diste
cuando yo te conocí.

Boca sucia,
ahora solo hay reproches
con insultos, sin respeto,
son tus celos enfermizos
que destrozan nuestro amor.

Boca sucia,
no merezco tus insultos.
Ten cuidado con tu lengua
que en una de esas la muerdes
y te vas envenenar.

No lo dice tu carita dulce y pura
de mujer muy distinguida
y de porte señorial.
Quien espera al ver tu linda figura
derrochando esa hermosura
y de paso angelical.

Es tu imagen muy sutil y delicada.
Es tu piel de terciopelo
como musa de pintor.
Sin embargo, se derrumba tu belleza
demostrando con tristeza
tu vocablo tan vulgar.